En San José de la Tinaja nació un hombre de gran corazón, Higinio Macías Macías, compositor de pura cepa y gran tesón. Desde joven, en el campo trabajó, la tierra su sustento le dio, pero la música en su alma siempre resonó.
La vida lo llevó a tierras lejanas, a los Estados Unidos, con duras aduanas. Su padre ya no estaba, y sus hermanos necesitaban su mano, Higinio, el mayor, con valentía y tesón, los sacó adelante, ¡qué hermano!
El tiempo pasó, su cabello se tornó blanco, pero su espíritu seguía intacto, siempre franco. Cuatro hijos, su mayor orgullo y bendición, Iván, Carlos, Elizabeth y Chuy, su mayor canción.
Iván, desde el cielo, lo mira con amor, y su fiel esposa Alicia, siempre a su alrededor. Juntos construyeron un hogar lleno de calor, donde la música y el amor siempre fueron el motor.
Don Higinio, un hombre de trabajo y fe, su legado perdura, su historia sigue en pie. Un compositor que en el campo sembró, y en la vida, una hermosa melodía compuso y nos dejó.
Este corrido es un homenaje a su vida ejemplar, un hombre que luchó por su familia, sin dudar. Don Higinio Macías Macías, un ejemplo a seguir, su historia de amor y sacrificio, siempre vivirá en el porve